Lima, 31 de mayo, 2024.- En un intento de elevar sus voces ante las autoridades, organizaciones de la sociedad civil y ciudadanos esperan el apoyo de todos los peruanos para firmar en contra del ingreso de semillas transgénicas de maíz y algodón a Perú.
El 29 mayo lanzaron una campaña de recolección de firmas para rechazar la solicitud del Ejecutivo que propone modificar la vigencia de la Ley de Moratoria N. ° 31111.
“Unidos por un Perú Libre de Transgénicos”, se llama la campaña que objeta la solicitud del titular del Midagri, Ángel Manero de levantar la moratoria impuesta a los transgénicos hasta 2035.
En la petición, explican que Perú al dejar de ser un país libre de transgénicos, la agroexportación se verá afectada significativamente, debido a que los países desarrollados prefieren adquirir alimentos orgánicos y sin contaminación transgénica.
De igual manera, indican que también se afectará nuestra gastronomía que ha posicionado al Perú en el mundo por su diversidad biológica y cultural.
Entre los firmantes de la campaña promovida por el Consorcio Agroecológico Peruano figura la Asociación Nacional de Productores Ecológicos (ANPE Perú), la Asociación Peruana de Defensa del Consumidor (ASPEC), la Convención Nacional de Agro Peruano (CONVEAGRO), Slow Food Perú, entre otras.
Como se recuerda, el Ministro Ángel Manero señaló, el martes 28 de mayo, ante la Comisión de Constitución del Congreso que, al autorizar la siembra de maíz y algodón transgénicos, busca contrarrestar el avance de las importaciones de ambos productos.
Ante esto, los firmantes de la petición responden: “rechazamos el argumento del Ministro en que las dificultades que pasa la pequeña y mediana agricultura se va resolver con la introducción de semillas transgénicas de maíz y algodón”.
“Las prioridades de la agricultura familiar tienen que ver con la falta de asistencia técnica, acceso al crédito, mercado, precio justo y tecnificación del agua de riego”, expone la petitoria.
Sostienen además que la medida afectaría gravemente las exportaciones competitivas de maíz y algodón desde un territorio libre de transgénicos, así como cadenas alimentarias relacionadas a la gastronomía y la alimentación nacional.
Las semillas transgénicas promueven el monocultivo, afectan los medios de vida y sustento de los agricultores, principalmente aquellos que abastecen los mercados locales.
También afectan la disponibilidad de alimentos diversos para el consumo humano que son la base para tener una buena alimentación.
De acuerdo a lo indicado en la petitoria, si el Gobierno consigue eliminar la moratoria con la delegación de facultades solicitadas al Congreso, Perú estaría impedido de:
1. Poner en valor la agrobiodiversidad andina y amazónica y fortalecer la Marca País.
2. Generar capacidades y construir infraestructura para conservar in situ nuestra agrobiodiversidad por las comunidades indígenas y nativas y la agricultura familiar.
3. Desarrollar investigación en biotecnología para valorizar económica, social y ambientalmente los recursos de la agrobiodiversidad.
4. Controlar las semillas transgénicas de las transnacionales, cuyas patentes son diseñadas para hacer un mayor uso de plaguicidas como los herbicidas.
5. Apoyar a la agricultura familiar, que genera el 70 por ciento de nuestros alimentos que no necesita de transgénicos para producirlos, sino de su agrobiodiversidad. Por el contrario, los transgénicos se emplean para producir insumos para la alimentación animal o la industria de alimentos ultra procesados.
6. Aplicar el principio precautorio en Perú, un centro de origen de biodiversidad, pues una vez liberada una variedad transgénica, es imposible frenar la contaminación genética en el territorio.
7. Frenar la contaminación cruzada de transgénicos afectando la producción de la agricultura familiar y su cultura de conservación cuidado e intercambio de semillas nativas adaptadas a todo tipo de suelos, climas y ecosistemas.